¡Menudo solecito! Daba gusto pasear por la ciudad, en especial por la zona vieja de Santiago. Parecía que el verano no quisiera irse. Son de esos días en que a uno no le cuesta nada levantarse pronto, aunque saliera de vinos hasta las tantas la noche anterior. Callejear y ojear tiendas y escaparates con un buen libro bajo el brazo; mirar al cielo y sentir el calorcillo; y pararse a escuchar -¡oh! ¡sorpresa!- las buenas voces de algunos artistas callejeros.
lunes, 28 de septiembre de 2009
miércoles, 9 de septiembre de 2009
9 de septiembre, cumpleaños de Mamaita.
...
¡Felicidades, Mamaita!
Suscribirse a:
Entradas (Atom)